jueves, marzo 28, 2024

Lumbre Brava

 

*El viaje de Navarro

Parece que febrero es el mes favorito de la familia Navarro Smith para viajar.

Hace tres años, siendo regidora, Samantha Smith se fue a Cancún con su esposo, en entonces diputado local Alejandro Navarro, y visitaron Chichén-Itzá mientras el Ayuntamiento revisaba el plan de gobierno municipal.

Este febrero le tocó a Alejandro, ahora en funciones de alcalde, hacer viaje, pero algo más lejos, hasta Shangai.

Ya se supo que el presidente municipal acompañó a su hija a turistear por aquellas tierras y para eso fue que notificó al Cabildo su ausencia del 25 de febrero al 4 de marzo.

Las redes sociales que todo lo ven y todo lo oyen, dieron cuenta de las fotografías en las que ambos aparecieron posando en puntos de aquéllas tierras orientales.

Así nos enteramos también hace tres años del paseo de la entonces regidora Smith, justo por las redes sociales que gustan de utilizar.

Y otra vez, no es problema que viajen para turistear (siempre que lo hagan con su dinero), pero el hecho es que el horno no está para bollos. En el municipio hay muchos pendientes como para para andar visitando otros destinos turísticos y dejar sin timón éste, ¿o no?

 

 

*El pretexto de siempre

Y a propósito del presidente municipal, éste halló lo que parece ser la excusa perfecta, aunque muy sobada, para los hechos de violencia en la capital.

Bueno, en realidad son dos excusas: la primera,  echarle la culpa al gobierno federal.

La segunda, a la “gente de fuera”.

Y es que después del asesinato de un hombre y el rescate de una mujer que estaba privada de la libertad en el Camino a las Momias, Navarro se subió a la montaña rusa en la que desde el sexenio pasado está trepado el gobierno del estado con esto de que la Federación tiene la culpa de todo por no mandar al Ejército y a la Gendarmería, y más recientemente por recortarle los fondos de Fortaseg.

No conforme, también culpó a algunos medios, por darle más relevancia al asesinato que al aseguramiento de un arma, que al parecer fue usada en el asesinato.

Y sí, se decomisó el arma,  pero después de que los presuntos responsables le ganaron la corretiza a los policías municipales que los tuvieron en la mira, y que no pudieron alcanzarlos con todo y que los presuntos estaban ebrios.

Y aunque es cierto que la investigación le corresponde a la Fiscalía general del estado y el tema de la portación de armas de fuego a la Federación, pues esta ecuación de la seguridad comienza con la prevención y la inhibición del delito…¿y adivine a qué autoridad le toca esto? Pues sí, al municipio.

 

 

*Un Ayuntamiento con más pena que gloria.

Las sesiones de Ayuntamiento muestran cada vez con mayor claridad el escaso interés de quienes conforman en Cabildo, y particularmente las fracciones de oposición, por plantear y dar vista y trámite a todos los asuntos importantes, prioritarios o urgentes que abundan en el municipio.

Y es que de plano, se han convertido en meros actos en los que las y los integrantes del Ayuntamiento –y como ya se mencionó, notoriamente de oposición-  se limitan a levantar la mano para “cumplir” con lo que solicita la Ley Orgánica municipal para registrar algunos actos de gobierno…o lo que se le parezca.

Es evidente, como en su momento lo dijo la regidora priista Diana del Rosario Paco Argüello, que se ha asumido a la perfección el papel de “oposición responsable sin caer en un espectáculo o circo”, y que más bien se actuaría reclamando alguna situación “con decencia y mucha cordialidad”.

Pero se pasan.

Con frecuencia, lo más interesante de estas sesiones es apostar a qué hora llegará el presidente Toño Trejo y no los temas generales, en los que la oposición no dice ni pío, al menos para registrar acto de presencia o manifestarse como representantes que son de partidos políticos distintos al de la mayoría.

Porque lo otro que podrían hacer es poner sobre la mesa las muchas necesidades, carencias y urgencias que tiene el municipio en temas como la seguridad, alumbrado público, recolección de basura…

 

*Votos son amores.

Lo que no deberían olvidar los morenistas Virginia Chacón Aguilar, José Luis Araujo Villalobos y el ex panista Miguel Ángel González Bravo, es que no fueron poco votos lo que otorgó electorado silaoense, pues la coalición Morena, PT, PES logró 16 mil 854 sufragios, permitiendo que sean estos tres regidores los que ocuparan sitios en el Ayuntamiento para trabajar. Porque de eso se trata, por si no lo han entendido.

Los votos del PRI fueron 10 mil 821 y con ellos llegaron al Cabildo José Cruz Rangel Pérez y Diana del Rosario Paco. Del PVEM, sus  8 mil 318 le dieron la representación en el Ayuntamiento a Ma. de la Luz Ibarra.

Y como todos entran en esta canasta, no podemos dejar fuera a la fracción del PAN, que; hay que recordar que el triunfo de Toño Trejo fue gracias a los 20 mil 735 votos y con esto al blanquiazul le alcanzó para cuatro regidurías, las de David Tovar Jasso, gran amigo del presidente Trejo; Marisela Rodríguez, Marcela Hinojosa y el  profesor ex alcalde Jorge Galván Gutiérrez.

Lo más criticable es que novatos en estas lides no son, pues varios de estos representantes populares ya pasaron por otros cargos, como para presentar cuando menos una idea, propuesta o problema a atender y solucionar.

Tanto que se pone al ex alcalde Juan Antonio Morales Maciel como el ejemplo más costoso en la administración pública municipal…cuando más bien lo que parece es que van que vuelan a emular las mismas costumbres.

¿O acaso será que la disminución salarial los tiene flacos, ojerosos, cansados y sin ilusiones para trabajar? Porque, o son toda discreción, o les tienen encomendado guardar celosamente el secreto de dónde, cuándo y cómo realizan los trabajos de comisiones, pues al menos por las  mañanas pocos de ellos aparecen en la Casa municipal.

Como sea, el actual gobierno de Trejo ha logrado lo que muy escasamente se ve en otros ayuntamientos en el estado –y todos los alcaldes y alcaldesas quieren, sueñan, anhelan-: al momento de arribar al salón Benito Juárez para las sesiones del Cabildo, lo único que resuena, claro y fuerte, es “Se aprueba por unanimidad, Señor Presidente”.

 

 

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