martes, marzo 19, 2024

Si marzo no hubiera existido…

En los tres meses que han transcurrido del año ( enero – marzo ) el país ha vivido la mayor desgracia en lo que se refiere a la incidencia delictiva y marzo ha sido el mes más violento de la administración del presidente Peña. Solo de homicidios dolosos en el país se registraron 2256 víctimas. De enero a marzo : 6511 en todo el país. Diez estados de la república concentran el mayor número de muertos.

Las fuentes de información están en el propio sistema nacional de seguridad pública, las cifras que aporta el sistema nacional de seguridad pública no es un asunto de especialistas, tampoco justifican un discurso insulso donde se destaca que son pleitos entre los delincuentes, esos argumentos son de políticos irresponsables, indolentes e ignorantes… o coludidos; son las estadísticas que reflejan, entre otras realidades, la incapacidad gubernamental para someter el problema. Situación que se ve con desesperanza entre los mexicanos por la combinación nefasta de la acción de los delincuentes y la falta de acción de las autoridades responsables y obligadas constitucionalmente.

Hay Estados donde el tema es cotidiano desde hace años y los incidentes, que no dejan de afectar a la vida de todos los mexicanos, está cambiando los hábitos y las costumbres pero nadie podrá decir que se está acostumbrando a vivir en esas circunstancias que destruyen los tejidos sociales, desalientan a la sociedad y llevan a extremos de rencores que tardarán generaciones en recuperarse. El alcance del daño que se produce a la sociedad es indescriptible. Guanajuato es parte de los Estados donde los homicidios dolosos se han incrementado exponencialmente: 3.6 homicidios al día. Creció 51% con relación al mismo trimestre del año 2016. Es el período con mayor violencia criminal en la historia del estado.

Por más que quisiéramos decir que en Guerrero, el Estado de México, Tamaulipas, Sinaloa, Michoacán, Chihuahua o Guanajuato, por mencionar algunos de entre los diez que tienen mayor incidencia delictiva, están tan acostumbrados que ya no deberíamos de preocuparnos más…la realidad es que nadie se acostumbra a la violencia, a vivir con miedo, a recibir la noticia de la ejecución de sus parientes o conocidos… estamos perdiendo el estado de derecho y la actuación de la autoridad está rebasada por la acción de los delincuentes.

Sin estrategia, sin dirección, sin compromiso es una ociosidad pensar que se reducirán los índices delictivos, después de casi cinco años la única acción relevante por los montos invertidos (lo que se ha podido saber por la creatividad periodística) en el programa escudo mismo que nunca ha sido evaluado, no se tiene una idea del costo de operación, solo tendremos los ciudadanos idea de para qué sirvió; cuando ya no haya nada que hacer. Si el poder legislativo se interesara en atender el tema de la inseguridad, que afecta a todos en el estado; las comisiones respectivas estarían viendo por la sociedad a la que dicen representar… la presidenta de la comisión de hacienda recientemente declaró que las auditorías en el congreso «salen» por presiones políticas; la única( si es que se hizo) al programa escudo es de 2014 , pero como a la señora diputada presidenta de la comisión de Hacienda no le parece importante poner en su agenda el tema pues ahí estará pendiente, ella tiene la facultad de llevar a revisión los temas que considere… ASÍ MADA MÁS.
¡A la comisión de seguridad no hace falta hacerle una sola pregunta…!

¿Cuál es la tasa de homicidios que esperan para asumir su responsabilidad?

¿Cuántos muertos le hacen falta a sus consideraciones?

¿Esperan que los muertos sean afectivamente cercanos a los políticos en turno para que haya

«presiones políticas»?

¿ Estarán esperando que les den la orden de pensar?

 

Hasta la próxima PROSPECTIVA.

José Gerardo Mosqueda Martínez,

Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato 

[email protected], [email protected]

gerardomosqueda/ mosquedagerardo

 

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