GUANAJUATO, Gto.– A fin de frenar la ola de inseguridad que azota al sur del estado, es urgente activar todo un sistema de inteligencia e investigación que haga cada vez menos indispensable el uso de balas.
En estos términos se pronunció el primer regidor priista de Uriangato, Emilio Álvarez, quien también lamentó que haya bajos niveles de confianza entre las corporaciones locales y las de estamentos superiores.
“La situación es muy delicada en toda la zona que colinda con Michoacán, hay rachas en las que aparentemente no pasa nada y de repente llegan unas rachas que se vienen con todo: no deja de haber ejecutados, no deja de haber desaparecidos, no deja de haber secuestrados”, expresó el también dirigente estatal de la Unión General Obrera, Campesina, Ejidataria y Popular (UGOCEP).
Insistió en que la operatividad policíaca se ha centrado mucho más en la reacción a quemarropa que en la táctica, por lo que —consideró— se le resta efectividad al trabajo contra la delincuencia.
Sobre la pregunta “¿qué hacer para resolver el problema?”, aseguró que este fenómeno ya no se contrarresta con la profesionalización de los agentes policíacos, sino con un trabajo de investigación e inteligencia por parte de las corporaciones de alto nivel.
El ex delegado especial del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI pidió trabajar en la obtención de información para localizar y desmantelar bandas, “pero no con plomazos ni más muertes”.
“¿Dónde se están juntando?, y voy por ellos; ¿dónde se están organizando?, y voy y los agarro, pero sin balazos, sin sangre y sin muertes. Eso es lo que tienen que hacer los Gobiernos, tanto federal como estatal”, remarcó el regidor de Uriangato.
Otro problema existente, subrayó, es la desconfianza entre corporaciones de los diferentes niveles de Gobierno, que por esta razón ya no cruzan ni comparten información sobre el modus operandi de los grupos delictivos.
