GUANAJUATO, Gto.- La Orquesta Sinfónica de Guanajuato volvió a brillar en su presentación de este fin de semana, al interpretar una de las más ambiciosas obras de Aaron Copland, la tercera sinfonía del compositor estadounidense, misma que se caracteriza por su complejidad, debido sobre todo a las variaciones tonales que se deben ejecutar a lo largo de la pieza dividida en cuatro movimientos.
Bajo la dirección del director invitado, Juan Carlos Lomónaco, los asistentes pudieron disfrutar de dichos contrastes a lo largo de la sinfonía para finalizar con una brillante y potente orquestación.
El concierto formó parte del ciclo “Recordando a Chávez”, por lo que además también se interpretaron obras de Dukas, cuya relación con Carlos Chávez influyó profundamente en su pensamiento musical según lo hizo saber el mismo orquestador mexicano.
Del compositor francés se interpretó la reconocida pieza “Aprendiz de Brujo”, famosa por haber sido utilizad en una de las películas de Walt Disney, y basada en un texto escrito por el alemán Goethe, en el que un aprendiz deseoso de imitar a su viejo maestro, consigue dar vida a una escoba a la que le ordena traer agua, hecho que luego descubre no sabe detener debido a su inexperiencia y que sólo es corregido finalmente por el viejo brujo.
Para continuar el homenaje a Chávez la orquesta tocó “Sarabanda para cuerdas del ballet “La hija de Cólquide”, una suite sinfónica que se estrenó el Teatro de Bellas Artes el 13 de junio de 1947 con el mismo Chávez al frente de la Orquesta Sinfónica de México.
Durante el concierto también se llevó a cabo el estreno de la obra “Brother Fox” del compositor Michael Fine, esta pieza fue escrita en 2016 y está inspirada en el personaje de la serie Sunday Philosopher Club de Alexander McCall Smith en la que el fagot fue un instrumento determinante para la obra.
Embruja” la OSUG con extraordinario concierto
